Podemos opinar :-)

Me vais a echar del bar, pero tengo que decirlo: La cena estupenda. Siempre hay gustos para todo, pero reconozcamos al menos que fue abundante, estuvo bien presentada e inmejorablemente servida y organizada. La música... bueno, no es mi música, pienso que sería mejor uno de nuestros CD grabados para la ocasión, pero no era de eso de lo que quería hablar. El tema son los chiquillos. Dios, que me echan :-) La cena de Alepo no se puede convertir en una juerga más de adolescentes con acceso a bebida y, para colmo, gratis. Bueno, no es esa al menos mi idea. Podéis empezar. ¿Qué pensáis los demás?

QUE?

Qué???

Pues...

... que nos cocine éste.

¡Menuda matanza!

¡ Menuda matanza!.

Algún que otro percance al inicio, mas que nada por falta de costumbre, pero el final casi perfecto, digo casi porque el cocho no se podrá degustar como mínimo hasta el lunes. El veterinario de caza, así que..... a esperar.

ERASE UN VEZ...

En un remoto y pequeño país, no independiente, se alzaba una pequeña villa dependiente del Ayuntamiento de Oión a la que todos llamaban Labraza...

MORIDOS,MUERTOS, MUERTE,

La muerte está en los catres:
en los colchones lentos, en las frazadas negras
vive tendida, y de repente sopla:
sopla un sonido oscuro que hincha sábanas,
y hay camas navegando a un puerto
en donde está esperando, vestida de almirante. (P.Neruda)