Una de cada diez personas sufre en mayor o menor medida astenia primaveral. Este trastorno, que surge con la llegada del buen tiempo, se caracteriza por un profundo cansancio, agotamiento, decaimiento y falta de energía para realizar la actividad habitual.
La astenia primaveral esta causada por una disminución de betaendorfinas en el plasma, sustancias que regulan el sistema bienestar malestar, que al alterarse produce una sensación de decaimiento y agotamiento.
Existen dos tipos de astenia primaveral: de origen físico que se suele manifestar a través de cansancio y debilitamiento corporal, y de origen nervioso que se caracteriza porque la persona muestra un especial cansancio a la hora de realizar alguna actividad mental.
Alegria que ya es primavera